La operación en cámara frigorífica es una de las aplicaciones más duras. Las temperaturas bajo cero no solo afectan a la capacidad de la batería, también a los componentes electrónicos, la lubricación, la carrocería, la capacidad de los conductores para operar la carretilla, sino que además necesitan un almacenamiento de alta densidad, lo que puede reducir aún más la selectividad y el rendimiento.
Sin embargo, existen soluciones que permiten operar las carretillas de manera fiable, eficiente y segura en estos entornos extremos.
Optimizando el rendimiento de la carretilla.
Las temperaturas muy frías reducen la capacidad de la batería de una carretilla en aproximadamente un 1% por grado por debajo de 20 ° C. También pueden alterar los componentes electrónicos de la carretilla, haciendo que el aceite sea más espeso y más viscoso, y que el metal (especialmente las uniones soldadas) sea más frágil.
Por estas razones, debe asegurarse que su carretilla sea capaz de soportar estas condiciones antes de ponerla en funcionamiento. Afortunadamente, todas las carretillas UniCarriers están diseñadas para funcionar de manera óptima en condiciones difíciles. No necesitan modificaciones para las operaciones de almacenamiento en precámara, pero en las operaciones de almacenamiento en frío con temperaturas de hasta -35 ° C, se necesitarán algunas adaptaciones para lograr eficiencia, fiabilidad y seguridad. La calidad del acero y las técnicas de soldadura de UniCarriers también garantizan que los componentes vitales sigan siendo fiables a temperaturas tan bajas.
Evitar problemas de condensación.
Confiar en el funcionamiento de las carretillas a temperaturas extremadamente bajas se puede lograr con algunas modificaciones, pero los problemas comienzan a surgir cuando las carretillas se mueven constantemente desde la cámara hacia exterior a temperatura ambiente y luego regresan. Los componentes metálicos congelados se dilatarán al calentarse, y también se pueden crear problemas con la humedad atmosférica condensada al congelarse ésta cuando la carretilla regrese al almacén frigorífico.
La condensación es quizás el mayor problema técnico para las operaciones de su almacén frigorífico. A temperaturas inferiores al punto de rocío de 6 ° C, la carretilla se verá afectada. Si ha visto salir una carretilla de un almacén frigorífico y cubrirse de escarcha, es fácil comprender cómo esto puede causar todo tipo de problemas. Fuera de la cámara frigorífica, la escarcha se derrite en agua, y cuando la carretilla vuelve a entrar en la cámara frigorífica, el agua se congela. Si esto sucede repetidamente, una capa gruesa de hielo cubrirá partes de la carretilla y podría causar daños a los componentes.
Se pueden tomar algunas medidas para reducir el riesgo de que esto suceda en sus carretillas.
- Mantener la carretilla en la cámara frigorífica. Cuando cambie las baterías, lleve la batería a la carretilla y no la carretilla a la batería. Si debe abandonar el almacén frigorífico, permanezca afuera el tiempo suficiente para permitir que la carretilla se seque completamente. Este tiempo se puede reducir soplando aire caliente sobre la carretilla con ventiladores grandes.
- Si entra y sale de la cámara frigorífica con frecuencia, asegúrese de que el tiempo que pase dentro de la cámara frigorífica sea lo más corto posible y de que la temperatura de la carretilla nunca sea inferior a 0 ° C.
- Si esto es difícil, haga lo contrario: pase tanto tiempo como sea posible dentro y tan poco tiempo como sea posible afuera. La idea aquí es que la temperatura de la carretilla nunca supere los 0 ° C.
Cabinas climatizadas
Usar mucha ropa gruesa puede mantener al conductor abrigado, pero también restringe su movimiento. También les hace más difícil ejecutar las tareas de conducción y elevación. Muchas carretillas elevadoras, como las carretillas de la serie UniCarriers Tergo®, están disponibles con cabinas con calefacción especialmente diseñadas para ayudar a mejorar la ergonomía y la eficiencia del operador en el almacén frigorífico. Otro desafío en las cámaras frigoríficas es mantener al operador abrigado. Las temperaturas extremadamente bajas del almacén frigorífico pueden ser muy peligrosas para el conductor si no está debidamente protegido.
Estas calefacciones pueden mantener al conductor en un ambiente cálido y seguro, frente a las condiciones árticas de la cámara frigorífica, y sin la necesidad de una gran cantidad de ropa aislante.
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